Este domingo, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos consideraron que no hay razón para aumentar la producción de petróleo, a pesar de la caída en el crudo en Irán y Venezuela.

Por su parte, el ministro de Energía saudita, Jaled Al Faleh, se mostró incluso preocupado por un alza de las reservas mundiales de petróleo «vemos que las reservas (de petróleo) aumentan».
Asimismo, durante la apertura de una reunión clave de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en Yedá, Arabia Saudita, aseguró «ninguno de nosotros quiere ver que las reservas se inflen de nuevo. Debemos ser prudentes«, agregó, en referencia a la situación de fines de 2018 que había llevado a una caída de los precios del crudo.
Además, Emiratos Árabes Unidos, fiel aliado de Riad, instó a mantener el nivel de producción de petróleo decidido por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) el año pasado, en 1,2 millones de barriles diarios.
«No creo que una flexibilización de los recortes de la producción de petróleo sea la buena medida«, teniendo en cuenta las condiciones actuales del mercado, indicó el ministro emiratí de Energía, Suheil Al Mazruei.
Pese a la caída de las exportaciones de petróleo iraní y venezolano, provocada por el restablecimiento de sanciones contra Teherán y la situación política en Caracas (Venezuela), las reservas de crudo sigue subiendo, ya había indicado el sábado al llegar a Yedá.
Con información de Globovisión