El estrangulamiento sexual, una práctica que busca intensificar las sensaciones durante el acto íntimo, puede tener consecuencias devastadoras para la salud.
Al comprimir las arterias carótidas, esta acción reduce drásticamente el flujo de oxígeno al cerebro, provocando lo que se conoce como hipoxia cerebral. En pocas palabras, las células cerebrales se ‘ahogan’ y pueden sufrir daños permanentes.
A largo plazo, esto puede traducirse en problemas de memoria, dificultades para concentrarse, cambios de humor e incluso un mayor riesgo de sufrir un derrame cerebral.
un estudio publicado por la revista médica Archives of Sexual Behavior reveló que se ha vuelto más común entre los jóvenes. Pero puede causar lesiones cerebrales incluso cuando la persona permanece consciente y no hay lesiones visibles, indicó la investigación.
Para llegar a esta conclusión, investigadores de la Universidad de Queensland y la Universidad de Melbourne aplicaron una encuesta a alrededor de 4,702 personas australianas entre los 18 y 35 años de edad, y encontraron que el 57 por ciento de ellos había sido estrangulado en el acto de manera consensuada al menos una vez en su vida.
El estudio también reveló que los jóvenes reportaron haber experimentado estrangulamiento sexual unas cinco veces en promedio durante el acto íntimo con tres parejas diferentes.
¿Por qué el estrangulamiento sexual puede causar lesiones cerebrales?
Esta famosa práctica en la intimidad puede causar lesiones cerebrales debido a la reducción o bloqueo del flujo de oxígeno.
Los investigadores advierten que si la práctica se realiza con frecuencia, es posible acumular lesiones cerebrales que, con el tiempo, aumentan el riesgo de desarrollar un derrame cerebral que comprometa la vida e incluso reduce las capacidades de la memoria.
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