La Policía Nacional ha desmantelado una red criminal transnacional dedicada a la explotación sexual de mujeres latinoamericanas, arrestando a 14 individuos y cerrando múltiples prostíbulos encubiertos en apartamentos a lo largo de España.
Las víctimas eran engañadas con falsas ofertas de empleo en línea y posteriormente trasladadas a Madrid, donde se les revelaba la cruda realidad, estaban endeudadas y obligadas a prostituirse para saldar una deuda impuesta de hasta 4.000 euros por su traslado.
Las mujeres eran distribuidas en viviendas precarias en diversas provincias españolas, forzadas a consumir drogas y sometidas a un control opresivo.
Vivían hacinadas en condiciones insalubres, sufriendo cortes de suministros básicos y asumiendo todos los gastos diarios. Además de la explotación sexual, la organización criminal obtenía ganancias ilícitas de la venta de drogas y medicamentos para la disfunción eréctil. Un inmueble adicional funcionaba como un centro de llamadas clandestino, donde otras mujeres eran explotadas laboralmente, gestionando las citas y servicios sexuales.
Se estima que el cabecilla de esta red criminal acumuló más de 800.000 euros en beneficios ilícitos durante los últimos cuatro años, a través de estas deplorables actividades.
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