El Gobierno de España ha declarado tres días de luto oficial en todo el territorio nacional tras el sensible fallecimiento del Papa Francisco. El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, anunció la medida en una declaración institucional desde el Palacio de la Moncloa, expresando el profundo pesar del Ejecutivo por la pérdida de quien calificó como «un hombre bueno y un gran papa».
«Lamentamos profundamente la muerte de un hombre bueno y de un gran papa,» afirmó el ministro Bolaños, subrayando el significativo impulso renovador y reformista que el pontificado de Francisco representó para la Iglesia Católica.
El Gobierno español reconoce el legado histórico del pontífice, destacando su incansable dedicación a los más vulnerables y su firme defensa de la paz mundial.
El ministro Bolaños resaltó la cercanía que el Gobierno de España siempre sintió hacia la labor y los valores del Papa Francisco, especialmente su compromiso con el diálogo y la solución diplomática de conflictos.
«El Papa Francisco dedicó su vida a los débiles. Por eso, el Gobierno de España ha sentido siempre tan cerca su labor y sus valores, especialmente su defensa de la paz, apostando siempre por el diálogo y por la solución diplomática a cualquier tipo de conflicto,» agregó.
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