Un punto le basta al Barcelona para proclamarse de nuevo campeón liguero. No obstante, también podrían cantar el «alirón» antes del inicio del encuentro si el Atlético de Madrid y el Real Madrid no ganan a Leganés y Alavés.

Con el partido aún pendiente ante el Villarreal, aplazado por la final copera, el Barcelona aventaja en once puntos más la diferencia particular a favor al Atlético y en quince al Real Madrid, que también tiene pendiente el encuentro ante el Sevilla.
Por lo tanto, si el Real Madrid no vence el sábado el duelo al Leganés y el Atlético tampoco lo consigue el domingo en Mendizorroza al Alavés, el conjunto azulgrana saltará al césped de Riazor como campeón. Si uno de los dos cuadros madrileños ganan, a los pupilos de Valverde les bastará con sumar un punto para conseguir el vigésimo quinto título de su historia.
Para el Deportivo el encuentro es dramático. Tiene necesidad imperiosa de ganar si no quiere decir adiós a la categoría. Incluso pudiera ser de forma prácticamente matemática si no vence ante su afición en Riazor y el Levante, que marca la salvación, saca al menos un punto ante el Sevilla este viernes.
El conjunto que dirige Clarence Seedorf sabe que lo tiene muy difícil, casi imposible, pero quiere aferrarse a las matemáticas para seguir con vida. El técnico holandés espera que los ‘tocados’ como por ejemplo Lucas Pérez, Pedro Mosquera, Adrián López y Sidnei Rechel puedan estar a su disposición.
Con información de Noticias24