Las fuertes lluvias que azotan el sudeste asiático han desencadenado inundaciones en Malasia y Tailandia, dejando un saldo de al menos seis personas fallecidas y decenas de miles desplazadas de sus hogares.
Según las autoridades malasias, el estado de Kelantan se ha visto especialmente afectado, con miles de residentes obligados a buscar refugio en centros de evacuación. Otras regiones como Perlis, Kedha, Terengganu, Selangor y Sarawak también han reportado daños significativos.
El primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, ha expresado su preocupación por la situación y ha ordenado a los equipos de rescate trabajar sin descanso para asistir a los afectados. El gobierno ha habilitado más de 320 refugios temporales para albergar a los desplazados.
En Tailandia, las provincias de Pattani, Yala y Narathiwat han sido las más afectadas por las inundaciones, que han provocado el desbordamiento de ríos y causado daños en infraestructuras. Las autoridades tailandesas han emitido alertas por posibles corrimientos de tierra y han instado a la población a tomar precauciones.
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