Con una inversión de 10 millones de euros, la administración regional liderada por el presidente Maurizio Fugatti de Italia busca repoblar sus pueblos que han experimentado una disminución constante de habitantes. Este plan experimental ofrece subvenciones de hasta 100.000 euros por solicitante, divididos en 20.000 euros para la adquisición de vivienda y 80.000 euros destinados a su rehabilitación.
La iniciativa se enmarca dentro de programas territoriales más amplios como Ri-Urb y Ri-Val, con el objetivo de garantizar el acceso a la vivienda y frenar la despoblación rural en áreas históricamente marginadas. La ayuda económica está condicionada a la compra de viviendas abandonadas que requieran obras de renovación estructural. Los beneficiarios deben comprometerse a residir en la propiedad o alquilarla a un nuevo residente por un mínimo de diez años a un precio de alquiler moderado, evitando así el uso turístico de las viviendas recuperadas y asegurando su destino como residencia permanente. El incumplimiento de esta condición implicará la devolución total de los fondos recibidos.
Los requisitos de participación excluyen a residentes actuales de la región menores de 45 años, buscando atraer nuevos residentes y lograr una mejor distribución geográfica de la población. Los solicitantes no deben ser propietarios de otras viviendas en los municipios seleccionados. Se permite la solicitud de ayuda para un máximo de tres propiedades dentro del mismo municipio, con una inversión total que no puede superar los 200.000 euros por inmueble, y los beneficiarios no podrán aportar más de 120.000 euros de fondos propios para evitar construcciones desproporcionadas. El incentivo cubre entre el 35% y el 40% del coste total del proyecto, variando según la ubicación de la vivienda.
El plan se aplicará en 33 municipios trentinos que han sufrido una pérdida de población significativa en la última década. La selección de estas localidades se basó en el índice de decrecimiento demográfico y un indicador de «turisticidad» para priorizar áreas donde la presión turística y la despoblación han generado tensiones.
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