Sean Combs, conocido como P. Diddy, se enfrenta a una grave acusación de haber agredido sexualmente a más de 120 personas, entre ellas varios menores de edad.
Según el abogado Tony Buzbee, quien representa a las víctimas, los abusos habrían ocurrido a lo largo de 25 años y habrían involucrado a personas influyentes en la industria del entretenimiento.
Las víctimas, tanto hombres como mujeres, tenían edades comprendidas entre los 9 y los adultos. Muchas de ellas buscaban iniciar una carrera en la música y fueron supuestamente engañadas por Combs con promesas de fama y fortuna.
Los abusos alegados incluyen agresión sexual, violación, suministro de drogas y confinamiento ilegal. Los hechos habrían ocurrido principalmente en fiestas, eventos de lanzamiento de álbumes y en el estudio de grabación de Combs. Según Buzbee, el 90% de los casos involucró el uso de drogas para facilitar los abusos.
Además de Combs, el abogado asegura que otras personas, incluyendo figuras destacadas de la industria, habrían participado en los abusos o los habrían encubierto.
Buzbee ha presentado demandas individuales en varias cortes de Estados Unidos y espera que se haga justicia para las víctimas.
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