Tras dos semanas de una inundaciones finalmente hay un rayo de esperanza para los residentes de Porto Alegre en Brasil. El nivel del río Guaíba, que alcanzó un pico de 5,30 metros, ha comenzado a descender ligeramente, ubicándose este viernes en 4,70 metros.
Si bien este descenso representa un pequeño alivio, el río aún se encuentra muy por encima de la cota de inundación, situada en los 3 metros. Esto significa que numerosas áreas del centro de Porto Alegre y de la zona metropolitana continúan inundadas, afectando a miles de personas.
A pesar de la persistente inundación, algunos residentes han podido regresar a sus hogares, como los habitantes del Quilombo do Areal, una comunidad de descendientes de esclavos en el barrio Menino Deus. Estas familias han regresado con cautela para evaluar el estado de sus pertenencias y comenzar la ardua tarea de limpieza y recuperación.
Las autoridades locales instan a la población a permanecer alerta y seguir las instrucciones de los cuerpos de emergencia. Se espera que las aguas continúen bajando gradualmente en los próximos días, pero el proceso de recuperación será largo y costoso.
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