Tras las ocho explosiones ocurridas el pasado domingo que estremeció a Sri Lanka, este jueves casi 4.000 militares con poderes especiales están desplegados en todo el país para la búsqueda y detención de sospechosos.
“Cientos de oficiales del Ejército y soldados de otras categorías (desplegados) a lo largo del país después de que una notificación en la Gaceta concediese poderes de búsqueda, detención o arresto sin orden judicial”, indicó un boletín del Ministerio de Defensa.
En su totalidad, 3.984 militares proveerán seguridad a iglesias y otros edificios religiosos, así como a otros “puntos vulnerables”, en coordinación con la policía.
Se trata de un despliegue militar, incluyendo controles en carreteras, controles de vehículos y patrullas a pie, entre otras medidas.
Para mantener el orden público, fueron otorgados poderes especiales al Ejército, luego de los atentados simultáneos del Domingo de Resurrección contra tres iglesias y tres hoteles de lujo.
Con información de Atodomomento