La noche del miércoles 18 de diciembre, un aparatoso accidente en Puerto Cabello, en la autopista Sorpresa-Muelles, a la altura de la pasarela Boca de Lobo, cobró la vida de cuatro personas, entre ellas una bebé de apenas dos meses.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Luis Fernando Colmenárez Gutiérrez (25), Erika Márquez (20) y su pequeña hija, quienes perdieron la vida en el acto. El conductor de uno de los vehículos involucrados, Daniel Guzmán, también falleció.
Según las primeras investigaciones, la familia Colmenárez-Márquez, con la bebé en brazos, intentaba cruzar la autopista en un punto no habilitado, a unos 50 metros de la pasarela. En ese momento, fueron embestidos por una camioneta Toyota Merú Prado, conducida por Guzmán.
Para evitar el impacto con los peatones, el conductor de la Merú perdió el control y colisionó frontalmente contra un vehículo Dodge Caliber que transitaba en sentido contrario. La violencia del choque provocó la muerte instantánea de Márquez, Guzmán y la bebé. Colmenárez, aunque fue trasladado de emergencia al Hospital Dr. Prince Lara, no resistió las graves heridas.
Más heridos y amplio despliegue policial
Además de los fallecidos, otras tres personas resultaron heridas de gravedad en el accidente. Johán Enrique Gómez Gouveia y Andrés Alejandro Maza, acompañantes del conductor de la Merú, fueron ingresados en el hospital porteño con politraumatismos severos. Por su parte, Jesús Rodríguez, conductor del Caliber, fue trasladado a una clínica privada.
Al lugar del siniestro se desplazaron comisiones de la Policía de Carabobo, Policía Municipal, Guardia Nacional Bolivariana, Bomberos Municipales y otros organismos de seguridad para atender la emergencia y realizar las labores de levantamiento de los cuerpos.
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