Con apenas 13 años de edad fue rociado de gasolina por un indigente, luego éste prendió al niño, provocando la muerte del menor tras sufrir quemaduras en el 90% de su cuerpo.

El lamentable hecho ocurrió el día sábado a las seis de la tarde, cuando el joven se encontraba atendiendo la tienda de abarrotes de su familia; cuando el atacante entró al local y le roció el combustible.
Los testigos cuentan que el incidente se vio involucrada la madre del fallecido y el propio agresor; ambos fueron alcanzados por las llamas.
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Los agentes de la policía municipal detuvieron al agresor, pero lo dejaron en observación debido a las heridas que presentó.
«Es un indigente, es el mismo de siempre. Cuando quería pasaba y se robaba los panes. Ahora ya pasó esto, no es justo», dijo una vecina a un medio del estado.