Lo que sería una jornada laboral tranquila se convirtió en tragedia para una familia venezolana; tras el asesinato del joven trujillano, Jorge Luis Daboín Flores; quien perdió la vida en manos de un ebrio que exigía ser atendido en el bar donde trabajaba el criollo en San Ignacio en Perú.

El Diario «El Correo de Perú» reseñó que el victimario fue identificado como Benito Carhualloclla Quispe, de 43 años de edad, quien fue al bar y el mismo se encontraba cerrado, no obstante pidió ser atendido y el joven venezolano contestó que estaba cerrado.
Según la Policía Carhualloclla Quispe se habría dirigido hasta el local nocturno, en busca de que le vendieran bebidas alcohólicas; el venezolano se asomó para advertirle a Quispe que el local se encontraba cerrado; lo que generó el enfado del mismo, sacando así su arma y detonando un disparo en la cabeza causándole la muerte al joven.
Luego del lamentable incidente, los vecinos llamaron a las autoridades, la Policía se apersonó y detuvieron al sospechoso; incautado un revólver Smith Wesson calibre 38 con el cual habría cometido el crimen.
Los familiares de la víctima esperan ahora los restos del joven, que se suma a la extensa lista de venezolanos que son asesinados fuera de su país de origen.
Con información de La Calle