Este lunes, bomberos de Portugal continúa trabajando para extinguir el incendio del sábado registrado en Vila de Rei y que se extendió hasta Mação, municipio vecino.

Aunque Protección Civil da por controlado gran parte del área del fuego, cuyo perímetro superó los 50 kilómetros; la preocupación se mantiene ante el empeoramiento de las condiciones meteorológicas a lo largo del domingo; que dificultó las labores de extinción e hizo avanzar las llamas.
“Nos espera un intenso trabajo”, dijo el comandante Luís Belo Costa, durante una rueda de prensa; donde reconoció la gravedad de la situación debido al aumento de las temperaturas y el cambio de la dirección del viento.
Precisó que alrededor de 800 bomberos trabajan en el incendio que ya habría arrasado 8.500 hectáreas