La blancorexia, también conocida como obsesión por los dientes blancos, es un trastorno psicológico que se caracteriza por la búsqueda incesante de tener una dentadura extremadamente blanca.
Las personas que la padecen suelen tener una percepción distorsionada del color de sus dientes, considerándolos más oscuros de lo que realmente son, y presentan expectativas poco realistas sobre los resultados que pueden alcanzar los tratamientos de blanqueamiento dental.
Blancorexia La nueva obsesión por los dientes blancos
Esta obsesión puede llevar a las personas a someterse a tratamientos agresivos y repetitivos para blanquear sus dientes, a pesar de los riesgos que esto implica para su salud bucodental. Entre estos riesgos se encuentran:
Erosión del esmalte dental: El uso excesivo de productos blanqueadores puede debilitar y desgastar el esmalte dental, lo que aumenta la sensibilidad dental y la predisposición a las caries.
Daño a las encías: Los productos blanqueadores también pueden irritar las encías, causando inflamación y sangrado. En casos severos, pueden incluso provocar retracción gingival.
Trastornos temporomandibulares: El bruxismo (apretar o rechinar los dientes) es un efecto secundario común de la blancorexia, y puede ocasionar dolor en la mandíbula, las articulaciones temporomandibulares y los músculos faciales.
Además de los riesgos para la salud física, la blancorexia también puede tener un impacto negativo en la salud mental de las personas que la padecen. La insatisfacción constante con la apariencia de sus dientes puede generar ansiedad, depresión y baja autoestima.
No existe un diagnóstico clínico específico para la blancorexia, pero algunos signos que pueden indicar que una persona la padece son:
-Preocupación excesiva por el color de los dientes.
-Búsqueda constante de información sobre blanqueamiento dental.
-Uso frecuente de productos blanqueadores, incluso en contra de las recomendaciones del odontólogo.
-Insatisfacción constante con los resultados de los tratamientos de blanqueamiento dental.
-Ansiedad o depresión relacionada con la apariencia de los dientes.
¿Qué hacer si se cree que se padece blancorexia?
Si crees que tú o alguien que conoces puede padecer blancorexia, es importante buscar ayuda profesional.
Un psicólogo o psiquiatra puede ayudarte a comprender el trastorno y desarrollar estrategias para gestionarlo.
También es importante consultar con un odontólogo para evaluar la salud bucodental y recibir asesoramiento sobre los tratamientos de blanqueamiento dental adecuados.
Concejos:
-Tener unos dientes blancos es saludable, pero no debe ser una obsesión.
-Una sonrisa sana es más importante que una sonrisa blanca.
-Si te preocupa el color de tus dientes, consulta con un odontólogo para obtener asesoramiento profesional.
-No te compares con los estándares de belleza irreales que se promocionan en los medios de comunicación.
-La autoestima no debe basarse en la apariencia física.
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