La violencia en la provincia de Manabí en Ecuador sigue imparable, luego de que se registraran siete asesinatos en menos de 24 horas. A pesar del estado de excepción impuesto por el gobierno del presidente Daniel Noboa.
Los crímenes, que se suman a la alarmante cifra de homicidios en la región, encienden las alarmas y ponen en tela de juicio la efectividad de las medidas tomadas para combatir la inseguridad.
Una ola de crímenes sin freno
Los asesinatos se perpetraron en las ciudades de Manta, Montecristi y Jaramijó, entre la tarde del sábado y la madrugada del domingo.
Entre las víctimas se encuentra Antonio Macías, tío de José Adolfo Macías Villamar, alias «Fito», líder de la banda criminal Los Choneros, quien fue acribillado en su vehículo mientras se encontraba en un autolavado en Manta.
Doble crimen en Jaramijó
En Jaramijó, dos hombres fueron asesinados mientras participaban en una misa en honor a un pescador abatido previamente en un operativo antidrogas. Por este hecho, cuatro presuntos sicarios fueron capturados.
Otras víctimas fatales
Jostin Alejandro Pilligua, de 22 años, fue asesinado a tiros mientras vendía bananos frente a un centro comercial en Manta. José Iván López Acosta, de 25 años, recibió varios disparos en una barbería de Montecristi. Las otras dos víctimas aún no han sido identificadas.
Manta supera las 150 muertes violentas
Con estos últimos crímenes, la ciudad de Manta ya supera las 150 muertes violentas en lo que va del año, a pesar de encontrarse bajo el estado de excepción. La ola de violencia que azota al país sudamericano no muestra signos de ceder, a pesar de las medidas implementadas por el gobierno para hacerle frente.
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