A lo largo de la historia los mitos alrededor del sexo han sido de lo más variados e incluso hasta a veces descabellados.
Aunque ahora nos jactemos de ser una sociedad más liberal y que habla se sexualidad sin tapujos, quedan todavía por desterrar muchas falsedades que se han instalado en lo que refiere a este tema que tantas curiosidades despierta.
Los mitos sobre el sexo que deben erradicarse
Es esencial que conozcamos más a fondo las realidades que el sexo trae consigo, y en esto se incluye desde aprender a cuidarnos apropiadamente hasta no exigirnos por demás por imposiciones mentirosas que se han cultivado en la sociedad. Además del mito de que te salen granos por masturbarte excesivamente, existen otros que podrían perjudicarnos aún más en nuestra intimidad.
El hombre debe eyacular para evitar problemas en los testículos. FALSO
Esta idea surge de poner al orgasmo como fin único en el sexo.
Nos olvidamos de disfrutar del acto y del recorrido hasta llegar a la meta. Incluso puede ser que no lleguemos a ese objetivo que nos fijamos con tanta firmeza.
Si esto sucede no hay de qué preocuparse.
Puede que el hombre sienta cierto dolor, pero eso no significa que vaya a tener problemas testiculares.
Usando preservativo se siente menos y aprieta el pene. FALSO
No es más que la excusa típica de aquel que quiere tener sexo pero sin detenerse a colocarse el profiláctico.
Esto chicas, no se negocia, más de mil veces nos han dicho que el preservativo es hoy en día la técnica más eficaz para prevenir enfermedades de transmisión sexual, y como tal deberíamos aplicarla siempre.
El sexo oral no transmite enfermedades de transmisión sexual. FALSO
Aunque para algunos esto sea revelador, sí, vía oral también se pueden transmitir enfermedades. Es más, la mayoría de las ETS se pueden llegar a transmitir por la boca.
Por ese motivo, los expertos sugieren usar protección incluso en estas prácticas.
No hay sexo sin penetración. FALSO
Pensar que el sexo solo se limita a la penetración es cerrarnos a tantas otras prácticas sexuales que podrían causarnos sensaciones maravillosas.
La simple masturbación, sea a solas o en pareja, ya implica un grado de placer exorbitante, y eso amigas, también es sexo.
El sexo desaparece con la edad. FALSO
En la tercera edad, también se tiene sexo. Parece mentira que tengamos que estar aclarándolo.
Los seres humanos somo seres deseantes, y como tales, nuestras ganas de tener sexo convivirán con nosotros quizás hasta la muerte.
Si gozamos de una buena salud se puede gozar de una sexualidad activa, tengamos 70, 80 o 90 años.
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