La historia de Doña Marta, una mujer colombiana de 39 años con 20 hijos, ha generado una gran controversia en el país. La mujer, que vive en una pequeña casa de tres habitaciones, afirma que tiene tantos hijos porque es “un buen negocio”.
Según Doña Marta, el gobierno colombiano le otorga subsidios mensuales por cada uno de sus hijos. Esto le permite mantener a su familia con un ingreso estable, a pesar de no tener un trabajo formal.
“La verdad, son como un negocio”, dijo Doña Marta en una entrevista con un medio local. “El gobierno me ayuda por cada niño, entonces yo recibo un dinerito por cada niño”.
Doña Marta recibe entre 300.000 y 320.000 pesos (76 a 81 dólares o 70 a 75 euros al cambio de enero del 2024), mientras, por los más pequeños, el Gobierno le otorga un bono que ronda los 120.000 pesos (30 dólares o 28 euros al cambio de enero del 2024).
La historia de Doña Marta ha sido criticada por algunos sectores de la sociedad colombiana, quienes consideran que es irresponsable tener tantos hijos. Otros, sin embargo, la defienden, argumentando que ella tiene derecho a decidir cuántos hijos quiere tener.
“Yo no hago nada malo”, Estoy criando a mis hijos con amor y respeto”.
Doña Marta está embarazada de su vigésimo primer hijo y dice que no planea detenerse ahí. “Hasta que el cuerpo me dé”, afirma.
La historia de Doña Marta es un ejemplo de las diversas realidades que se viven en Colombia. Es una historia de amor, de familia y de negocio.
Puedes seguir leyendo: Caza de perros asilvestrados en Chile: Proyecto de ley aprobado
