Un hombre oriundo de China contrajo una infección parasitaria por un gusano que estaba alojado en su cabeza luego de comer una rana cruda durante su niñez.
Según informó Daily Mail, el hombre colapsó e ingresó de emergencias al hospital y los médicos creían que se trataba acerca de un derrame cerebral puesto que el paciente presentaba un fuerte dolor de cabeza y, además, poseía mucha dificultad para caminar.
El hombre presentó “debilidad muscular, dificultad para tragar, hablar, y problemas de coordinación”, lo que le dió motivación a que los médicos a que le hicieran una resonancia magnética que reveló una lesión en el cerebro.
Después que los especialistas descubrieran la infección y lo operaran, el hombre les comentó que “a los 9 años sufrió una fractura y probó un remedio popular que consistía en comer ranas vivas”, relató. Él las ingirió por varios días, al creer que eso lo iba a sanar, agregó el medio.
Con información de El Farandi
