El panda gigante macho, Chuang Chuang, prestado a Tailandia por China y cuya vida sexual había cautivado a todo el reino, murió a los 19 años en el zoológico de Chiang Mai.
Además, Chuang Chuang, residente del zoológico de la ciudad del norte desde octubre de 2003, llegó con Lin Hui, una hembra, y ambos vivían en un recinto con aire acondicionado.
Los hábitos de apareamiento de la pareja, o la falta de ellos, se convirtieron en un atractivo público, ya que a Chuang Chuang le pusieron una dieta baja en carbohidratos y le mostraban videoclips pornográficos para intentar impulsar deseo sexual hacia su pareja.
Asimismo, después de luchar por concebir, Lin Hui finalmente dio a luz gracias a la inseminación artificial de Linping en 2009, lo que dio lugar a un “Canal Panda” en directo las 24 horas del día.
Este martes, los tailandeses se despertaron consternados con la noticia de la muerte del animal.
Por su parte, Wutthichai Muangmun, director del zoológico de Chiang Mai, contó a los periodistas que antes de su muerte, el panda estaba haciendo lo que más le gustaba: comer bambú. “Caminaba por ahí, pero se tambaleó y cayó al suelo“.
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