Este jueves, murieron al menos dos personas y otras 14 resultaron heridas al estrellarse el avión de pasajeros, AN-24, cuando realizaba un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Nizhniangarsk, en el este de Rusia.
El portavoz de la administración de la república rusa de Buriatia, Nóvosti Alexéi Físhev, informó a la agencia oficial Ria que “los dos pilotos fallecieron. Los pasajeros están fuera de peligro. Fueron rescatados 42 adultos y un niño”.
En este sentido, la aeronave perteneciente a la compañía aérea Angará, había despegado de Nizhniangarsk con destino a Ulán-Udé, pero tras detectar un fallo en uno de los motores, los pilotos decidieron regresar al aeropuerto de partida.
“Según datos preliminares, al aterrizar el avión se salió de la pista unos 100 metros; colisionó con una instalación purificadora y se incendió“, indicó Físhev.
Además, el jefe la república de Buriatia, Alexéi Tsydénov, detalló que ninguno de los heridos se encuentra grave.
“Entre los catorce pasajeros que necesitaron asistencia médica no hay heridos graves. Se trata de lesiones leves y de mediana gravedad”, aseguró Tsydénov a la cadena de televisión Rossiya 24.
Conforme con la administración del aeropuerto de Nizhniangarsk, los pilotos informaron a la torre de control de fallos en los sistemas de mando del AN-24 antes de realizar el aterrizaje, lo que permitió desplegar oportunamente los equipos de emergencia.
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