Un nuevo temblor sacude Taiwán este jueves de magnitud 5.7 con epicentro en el océano Pacífico, cerca de Yilan.
Aunque el temblor se sintió con fuerza en gran parte del territorio, especialmente en Taipéi donde interrumpió el servicio del metro, afortunadamente no se reportan víctimas ni daños estructurales de consideración.
Este terremoto fue seguido poco después de cuatro temblores de magnitudes de entre 3.4 y 4.7, todos ellos registrados frente a las costas de Yilan.
Expertos señalan que Taiwán, ubicada en una zona de alta actividad sísmica, es propensa a este tipo de eventos.
A pesar de la frecuencia de los temblores, el país cuenta con rigurosas normas de construcción que ayudan a mitigar los daños.
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