La tos en niños es una de las enfermedades más comunes y más fáciles de contagiar.
Por lo general, la tos de un niño no es motivo de preocupación extrema. Muchas veces, puede ser gracias a un resfrío común o incluso puede ser provocada por alergias.
Debido a que los medicamentos de venta libre tanto para la tos como para el resfrío no se recomiendan a los niños menores de 6 años, puede resultar complicado saber cómo ayudar al niño a sentirse cómodo y aliviado, especialmente si la tos lo mantiene despierto y no lo deja descansar por la noche.
Aquí te compartimos siete maneras de tratar la tos de tu hijo en casa, toma nota:
Remedios caseros para aliviar la tos de un niño
- Una cucharada de miel (mayor de 1 año): Una cucharadita de miel podría ayudar a combatir la tos.
Sin embargo, solo debe administrarse a niños mayores de 1 año.
- Beber líquidos calientes: prepara al niño mucho líquido para tomar durante el día.
Los líquidos calientes, como el té sin cafeína, el caldo, la limonada o agua tibia, aflojan la mucosidad y alivian el dolor de garganta.
- Utiliza un humidificador: El aire seco puede empeorar la tos. Por lo tanto, un humidificador de vapor frío cerca de donde el niño duerme puede ser una buena opción para que respire mejor.
- Dulces helados: para la tos en niños algo frío como paletas o helados para aliviar la garganta son excelentes.
Remedios caseros
- Respirar vapores de agua tibia: que el niño respire vapores de agua de un baño o ducha caliente puede aflojar la mucosidad, además de calmarlo y relajarlo antes de acostarse.
- Solución salina: como un aerosol o rocío nasal, puede ser de gran ayuda para aflojar la mucosidad de la nariz.
Asimismo, para ayudar a mantener las vías respiratorias libres anima al niño a que se suene la nariz siempre que sea necesario.
- Dormir: dejar al niño descansar y dormir mucho es importante para favorecer la curación.
Recuerde que un niño puede tardar un par de semanas en recuperarse de un resfrío.
Sin embargo, si la tos del niño no mejora, está acompañada de síntomas como fiebre alta por varios días o dificultad para respirar, habla con tu pediatra lo antes posible.
Con estos consejos el niño podrá aliviarse de la tos y volver a su rutina y actividades rápidamente.
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