Ha pasado una semana tras las inundaciones en Sudáfrica y hasta ahora la cifra de personas fallecidas son de 448 y ha dejado pérdidas millonarias.
La región de Durban ha sido devastada por las fuertes precipitaciones, provocando el caos en la ciudad, debido a carreteras destrozadas, puentes derrumbados y canalizaciones abiertas.
La ministra Nkosazana Dlamini-Zuma aseveró que «Estas inundaciones son las peores inundaciones que jamás hayamos visto». «El impacto de estas inundaciones está mucho más allá de la provincia«, agregó.
Más de 600 escuelas resultaron dañadas por las inundaciones y 101 quedaron inaccesibles.
La ministra de Educación, Angie Motshekga, expresó que «La cifra preliminar (de daños) es de 442 millones de rands (30 millones de dólares), y eso solo se relaciona con la infraestructura. Muchas cosas están dañadas en las escuelas».
Los camiones cisterna intentan transportar agua a la población, pero algunas zonas siguen siendo inaccesibles.
El puerto de Durban, una de las principales terminales marítimas de África y piedra angular de la actividad económica nacional, volvió a operar, pero entre 8.000 y 9.000 contenedores están actualmente a la espera de ser descargados.
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