Autoridades sanitarias de Colorado en Estados Unidos, activaron un plan de emergencia debido a los altos niveles de contaminación y toxicidad presentes en el agua.
El plan de emergencia se aplicará en varias ciudades, incluida Denver; ya que la contaminación podría afectar por lo menos 3,5 millones de personas que se surten de los pozos.
El ente precisó que los químicos presenten en el agua producen enfermedades renales, cáncer y problemas de desarrollo.
Entre tanto, el Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de Colorado señaló que los elementos tóxicos provienen de industrias, bases militares e incluso cuarteles de bomberos.
Además, entre los químicos más comunes presentes en el agua se encuentran: los fluoroquímicos, o PFAS; se encontró en áreas de Denver con un nivel casi 3.000 veces superior a los límites establecidos como aceptables por el Gobierno federal.
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